Llego tarde a la conversación porque estaba demasiado ocupada roleando una adolescente americana.
Como ha dicho alguien, esto es ponerle puertas al campo. Pero no en el sentido de "los chavales no van a permitir que les quitemos una libertad que tienen", sino en el sentido de "a buenas horas convences al gobierno de que se enemiste con las empresas que se hacen de oro vendiendo móviles a la chavalada".
Lo siento, pero hemos llegado al momento de la historia en el que no se van a aprobar medidas a gran escala que hagan daño a intereses capitalistas. La cagamos. Había que adelantarse a que el capital tomara el control y atara de pies y manos a los gobiernos. Eso no se ha hecho, y ahora toca comer mierda.
Eso los hecho objetivos.
Por mi parte subjetiva, diré que lo que los menores menos necesitan es que se les quiten más derechos. Los niños no tienen apenas derechos ya, y eso tiene sus consecuencias.
Por ejemplo, gracias a que no tienen representación política, ninguno de los temas que les importan tienen una defensa en el ámbito político con una fuerza equivalente al número o importancia de los menores para la sociedad. Les enseñamos la importancia del medio ambiente y la tolerancia, los convencemos de ello de hecho, pero dejamos que las "realidades prácticas" (el dinero, la autoridad impuesta, etc...) les vaya restando importancia a esos ideales hasta que cuando al fin tienen la edad de votar, ya no tienen ni tiempo, ni energía ni optimismo para moverse y arreglar el desaguisado que se les ha servido.
Lo único que pintan los menores en política es como herramientas propagandísticas, para que algún hijoputa rancio que hay que hacer X cosa "por los niños". Pero los niños mismos no tienen ni voz ni voto, y la mayoría de la gente no es consciente de lo que eso nos cuesta, y nos va a costar.
Si al final se les acaban quitando los móviles, no será por su bien, sino para tenerlos aún más controlados si, quizá, en un futuro no tan lejano, se empiezan a radicalizar en idea y en actos al ver la que les va a caer encima.