Berti Es un tema tricky porque depende mucho del tipo de juego, tener un mundo abierto es una oportunidad de ofrecer muchas cosas únicas opcionales que ver o hacer, enseñar distintos estilos de vida que tienen los NPCs a lo largo y ancho de un mapa o tener eventos memorables que a lo mejor son exclusivos del jugador que haya explorado cierta zona.
Pero sí que sé lo que hace un mal mundo abierto: tener contenido clonado, repetitivo, sobredosis de marcadores en el mapa, espacios en los que no hay nada, un protagonista que no se calla la puta boca, mil cosas que recoger y coleccionar que luego no usarás... Y realmente incluso juegos como Morrowind o Dragon's Dogma que diría tienen un buen mundo pecan de varias de estas cosas, hasta cierto punto es inevitable, no puedes mantener un nivel de calidad alto en un mapa gigante.
Pero seguro que aquí varios recordamos la magia de algunos momentos donde el mundo abierto funciona bien, como encontrar Oasis en Fallout 3, pegarte contra un grifo en Dragon's Dogma mientras estabas de camino a tu destino, llegar a un nuevo pueblo en Zelda BOTW...