A mí nunca me terminó de gustar el tono empalagoso y almibarado de los temas de LODVG. Que sí, que Amaia tenía un vozarrón y Leire tampoco se queda atrás, pero a pesar de lo pegadizos que eran los temas era escuchar las letras y me entraba repeluco. Dicho esto, me parece fantástico que Leire cargue contra la banda en su tema, como mil veces se ha repetido los artistas utilizan la música para hacer terapia. Esto no lo inventó Shakira, le va haciéndose desde siempre, tanto en hombres como en mujeres.