Es un género en el que depende casi por entero de que conectes con su narrativa y en todos caso, con su ambientación. Si lo que cuenta te da más o menos igual es difícil que te guste. A mí Gone Home por ejemplo me parece una obra maestra, porque conecté mucho con él, de hecho es de mis videojuegos favoritos. Dear Esther me parece un rollo macareno, y The Stanley Parable me gusta moderadamente.
Stray me encanta porque tiene una de las mejores ambientaciones que recuerdo en un juego de ci-fi y además es muy llevadero y bastante entretenido manejar al gato. What Remains of Edith Finch me encanta también, es como uno de esos cuentos que abres y salen figuras de papel, pero en versión trágica y con la duración perfecta.