Con tanto calor os traigo una historia calenturienta. La narración está un poco adornada pero los eventos son los que yo he visto.
Voy a entrar un poco en mentalidad Daga Negra - Rhage y narrar el sueño que tuve anoche.
Estábamos todos en una casa rural desperdigados, y yo estaba hablando con @KatamariRoller de Warhammer 40k tras haber acabado Rogue Trader. Entonces en un momento dado conectamos bastante y Kata me pregunta si quiero salir a solas con ella. Vamos a suponer que no es Murcia a 43 ºC y que es por la noche, que si no el Sol te derrite en la calle. El caso es que el contexto no dejaba lugar a dudas: Kata quería enrollarse conmigo. Y además a mí me apetecía: aparte de buen feeling hablando, Kata era una chica atractiva, una especie de Bailey de Innisport, guapa, no tan alta, morena y con pechos grandes pero no tanto como Bailey. Iba vestida de forma sexy, con una camiseta que dejaba al descubierto la franja del ombligo, unos pantalones cortos y unas sandalias.
Le digo que para qué quiere que salgamos, y eso la desactiva sexualmente: ella había tomado la iniciativa dando el paso importante, arriesgándose, exponiendo sus sentimientos, y pese a lo obvio de la situación, yo le pedía que verbalizara con claridad qué estaba proponiendo sin lugar a dudas. O era muy tonto o muy cobarde, pero en cualquiera de ambos casos la torpe respuesta por mi parte se había cargado la magia del momento, así que me dijo que para nada, que lo olvidara.
Así que se va a la cocina y se pone a prepararse un bol de palomitas. Cuando me doy cuenta de mi error la sigo e intento subsanarlo. Pienso en abrazarla por detrás mientras está en el banco de la cocina pero no tenemos confianza para eso y como tenga algún cuchillo a mano la cosa iba a acabar muy mal, así que me acerco con los brazos extendidos y los paso por sus costados, deslizándolos rozando con ellos su piel mientras avanzo lentamente acercando el resto del cuerpo, como preguntando si este contacto me está permitido. Ella era consciente de mi presencia en la cocina pero se sobresalta ligeramente al notar mis brazos porque no se esperaba el contacto, aunque no hace ademán de rechazarlo. Así que cierro la distancia que nos separa hasta pegar mi cuerpo al suyo y susurrarle en la oreja si todavía quería que saliéramos fuera.
Ella inclina la cabeza por el cosquilleo que le producen mis palabras en su oído, se revuelve, apoya una mano en mi pecho empujando mi cuerpo suavemente para atrás y me dice que mi oportunidad ya la tuve antes. Le pregunto si la sigo teniendo y sonríe satisfecha al ver que ahora sí era yo quien estaba tomando la iniciativa y arriesgándose. Pero no iba a perder el control de la situación, el tempo quería marcarlo ella, así que coge su bol de palomitas y me hace un gesto con él como diciendo que ahora tocaba eso, me contesta que ya veremos, se va al sofá del salón, pilla el mando a distancia y pone la tele.
La sigo y me siento en la otra esquina del sofá, ignorando la tele y mirándola a ella mientras se come las palomitas, deseándola con lujuria. Sentirse observada no parece incomodarla, al contrario, parecía estar disfrutando tanto de torturarme con la espera como de verse deseada, e incluso eso se refleja en la forma de comerse las palomitas, con un ritmo lento y jugando de forma sensual con ellas al llevárselas a los labios.
Cuando acaba, deja el bol en la mesa, gatea por el sofá hasta mi posición y me dice que "mejor fuera". Claro, dentro podría aparecer un Tombi haciendo de Pizz y gritando "Pizz también quiere, QUIERE" o un Milipu interpretando a Elijah diciendo que con él no quiere nada porque Elijah es negro y Bailey lo odia a muerte.
Entrelazamos los dedos de las manos sin cerrarlas mientras vamos al exterior y... ahí se va a la mierda el sueño, se desestabiliza y pierde coherencia. Elegimos ir a un descampado, a un par de metros de distancia de dos tíos que están ahí fumándose un canuto, encima la tierra sobre la que estamos tiene semienterrada una cagada de perro, resulta que a los tíos los conozco y me pongo a hablar con ellos no sé de qué, y eso es lo último que recuerdo.