Por una parte el invierno meteorológico termina el 28 de febrero. Los meses de diciembre y enero tuvieron carácter cálido y muy cálido respectivamente en la Península. Diciembre fue muy seco en casi todo el país y enero fue bastante húmedo en la mitad occidental, mientras que la mitad oriental estuvo en la media, incluso algo seco. Esto a falta del resumen de febrero.
Pero si uno quiere creer que dos semanas excepcionalmente lluviosas en marzo (ya en primavera meteorológica) invalidan una predicción estacional (que ni siquiera era para esta estación) pues estáis al nivel de "ufff, una semana de ola de calor, esto prueba el cambio climático", es decir, en un estercolero intelectual del que uno se asombra en pleno 2025. Más cuando la mayoría no sabéis ni cómo, ni dónde se hacen las predicciones.