A pesar de las malas críticas que Una película de Minecraft ha recibido, el título dirigido por Jared Hess se ha transformado en un verdadero fenómeno. Con más de 300 millones de dólares recaudados en la taquilla internacional en su primer fin semana de estreno, este filme está llamado a ser uno de los de mayor rédito en 2025.
Tanto es así que la euforia se ha desatado en los cines entre los niños y adolescentes que acudían a ver la historia protagonizada por Jack Black y Jason Momoa, especialmente en la escena de boxeo del personaje de Garrett (Momoa).
En un vídeo compartido por Discussing Film, la policía tenía que intervenir expulsando a varios jóvenes del cine tras una respuesta exacerbada, molestando al resto del público presente. Si bien, a juzgar por las imágenes compartidas, esta reacción era bastante generalizada en la sala, repitiéndose estos días en muchos otros lugares.
"La policía tuvo que expulsar a varios niños del cine durante una proyección de Minecraft después de su reacción a la escena de Chicken Jockey".
"La gente en el cine se está volviendo loca con la nueva película de Minecraft como si fuera el final de Vengadores: Endgame".
"Primero minamos, luego fabricamos. ¡A Minecraftear!' El peak del cine".
Aunque los vídeos de los gritos, especialmente del público masculino más joven, divertían a los que lo veían, no lo hacía tanto los destrozos que hacían en las salas al tirar la comida por todos lados.
"Convencido de que esta película fue creada con el único propósito de hacer que todos los empleados del cine se suicidaran", señalaba al hilo otro usuario de la red social X, antes conocida como Twitter. Un mismo mensaje compartido por muchos.
"¿Es raro tener la misma edad que ellos y no pensar que hacer un desastre en un teatro y comportarse como unos idiotas es divertido?", "Quizás sea la primera vez que me siento viejo, porque no lo entiendo para nada. Ser tan pesado en un teatro, causándoles un desastre a estos trabajadores, es patético", "Las reacciones están bien, pero la gente que tira comida y mierda simplemente está siendo unos idiotas", eran otros de los tuits más compartidos entre los espectadores.
Con todo ello, Una película de Minecraft ha revitalizado una taquilla que en las últimas semanas estaba sufriendo un bajón, animando al público a que acuda en masa a ver una comedia divertida sin pretensiones. Eso sí, siempre desde el respeto hacia los demás, y es que a muchos espectadores aún les queda mucho de lo que aprender.