Las premisas suenan interesantes, pero de ahí a hacer un vídeo entero y que pueda pasar por algo de verdad hay un trecho.
O subes la apuesta (porque eres un humano de verdad) o creas una relación parasocial más fuerte.
Me cuesta creer viéndome estar del lado de los Señores del Contenido™, pero aquí estamos.