Sorprendente nombramiento en la nueva cúpula arbitral. Fran Soto, presidente del Comité Técnico de Árbitros, ha delegado la tarea de la implantación de la Inteligencia Artificial en el estamento al famoso hacker Chema Alonso. Un reputado informático que ha llegado a ser ejecutivo de Telefónica y que ahora será asesor del CTA.
Chema Alonso (Madrid, 1975) es conocido como uno de los hackers más influyentes del país. Empezó en la informática desde joven y se formó como ingeniero y doctor en seguridad informática. Realizó el Master de Sistemas y Tecnologías de la Información y se doctoró en Seguridad Informática. Consejero de Ciberseguridad de Telefónica. Desarrolló su empresa ElevenPaths, que acabó firmando por Telefónica. Pasó de ser un famoso hackers a ser uno de los mayores vigilantes y crear una red para proteger a la compañía de telefonía. En dicha compañía lideró los proyectos de big data, inteligencia artificial y nuevas plataformas digitales. Llegando a ser miembro del Comité Ejecutivo de Telefónica hasta su reciente salida.
Alonso, además, tiene un blog que actualiza asiduamente y que se llama ‘Un informativo en el lado del mal’, donde expone sus ideas y reflexiones sobre ciberseguridad. El informático, además, tiene establecido un sistema de pago para contactar con él por el que cobra hasta nueve euros responder un correo o una reunión virtual de 20 minutos por 53 euros.
Fran Soto delega en él la implantación de la Inteligencia Artificial, una de las grandes demandas de la Federación y LaLiga para el arbitraje. Quieren establecer un sistema por el cual la IA ayude a decidir qué árbitros son los idóneos para pitar cada partido o cuáles son los que deben ascender y descender cada temporada. Soto fue claro sobre la importancia del departamento que liderará Alonso: “El avance es tecnología. Es esencial contar con herramientas de Inteligencia Artificial, que no sustituirá a personar. La IA viene a ayudar, no a reemplazar”.
https://as.com/futbol/primera/asi-es-chema-alonso-el-hacker-fichado-por-el-comite-arbitral-n/
Desde la ignorancia ¿este no era un vendehumos?