Pues me da buenas vibraciones. Parece que abraza por completo el rollo "camp" de los juegos originales que, junto a su saga hermana Final Fight, bebían en parte del mundillo del wrestling en lo estético y exagerado. Además que el icónico, SF2, era un juego bastante desenfadado, por más que nos alucinase de críos.
Puede salir una peli bastante divertida. Veremos...
