El primero era más directo, y desde el principio podías hacer bastantes combinaciones estratégicas que en esta secuela no estoy viendo tanto.
Pero lo que más noto es que los combates en el primero staban mucho mejor medidos y cuidados. Pensados para que tuvieras que realmente pensar qué hacer con cada turno.
En esta secuela ni de coña me da esa sensación.
Que no digo que el juego sea malo ojo, me está gustando y bastante. Pero lo veo inferior.