Mira que con Alan Wake y Wukong, o incluso con Plague Tale y demás bastiones gráficos, llegaba un momento en que el impacto gráfico perdía fuelle...
Aqui no me pasa. 70 horas y me sigo quedando embobado a cada puto rato, ya sea pasando por las mismas calles principales de siempre, descubriendo algunas nuevas, en el desierto...
Es increíble como un mapa aparentemente tan pequeño para un sandbox, es tan enrevesado que consigue parecer fresco más tiempo que casi cualquier otro juego de mundo abierto.