Ikki_fenix Pues que en España se nos daba bien quemar Brujas
En 2004 se publicaron las "Actas del simposio internacional: La inquisición", gracias a la apertura de los archivos secretos de la Congregación para la Doctrina de la Fe ordenada por Juan Pablo II en 1998. En estas actas se recoge toda la posición católica en materia de documentación sobre los procesos inquisitoriales en la Europa católica donde regía la Santa Sede en el campo espiritual. De acuerdo a esta posición, es un mito hablar de genocidio en países como España por brujería, en cambio, los protestantes exageraron seguramente (ver Leyenda negra de la Inquisición española) para mejorar su oposición al Imperio español de la época. Así, se difundió al público los siguientes datos sobre personas que llegaron a ser quemadas en la hoguera por acusación de brujería:
Alemania: 25.000 (sobre 16 millones de habitantes)
Polonia - Lituania: 10.000 (sobre 3 millones y 400.000 habitantes, respectivamente)
Suiza: 10.000 (sobre 1 millón de habitantes)
Francia: 4.000 (desde los siglos XV al XVIII)
Reino Unido: 2.500
Dinamarca - Noruega: 1600 (sobre 970.000 habitantes)
España: 49
Italia: 36
Portugal: 4
La brujería en España
Aunque sería el último país en abandonar la Inquisición, ya hacía mucho tiempo que no ejecutaba a muerte a supuestas brujas; se ejecuta a la última en 1611, la adolescente catalana Magdalena Duer. Los últimos casos son en los cantones suizos con Anna Göldin en Glaris, en 1782 (es la última ejecución en Europa Occidental), y en Polonia, en 1793.
A los brujos y brujas condenados la Inquisición les imponía desde la abjuración de levi, con destierro de seis años de la ciudad donde viviera, hasta la pena de muerte como en el famoso caso de las brujas de Zugarramurdi (1610). Después de este proceso la absolución fue frecuente. Con la confesión del brujo, la Inquisición advertía:
Que no procede en estos casos por solo la forma de ser brujos y hacer los dichos daños, si no testifican de haberlos visto hacer algunos daños, porque muchas veces lo que dicen han visto y hecho les sucede en sueños y juzgan se hallaron en cuerpo y lo vieron e hicieron con los que testifican y les figura el demonio cuerpos fantasiosos de aquellos que dicen vieron sin haberlos visto ni hallándose allí para que hagan esos daños de inflamar en peligro a los que no tienen culpa.
Julio Caro Baroja afirma en El señor Inquisidor y otras vidas por oficio:
Los inquisidores eran más juristas que humanistas y teólogos. La jurisprudencia más o menos secreta que podían estudiar era grande, casi tan grande como el escepticismo de muchos de ellos, acostumbrados a ver imposturas y engaños en cantidad de actos hechiceriles. En el siglo XVII los españoles, por otra parte, no tenían mucha fama como magos y hechiceros. Alguien sostuvo —con clara animadversión hacia el país— que el diablo no se fiaba de sus habitantes.
https://es.wikipedia.org/wiki/Inquisici%C3%B3n