Ayer me tiré el día entero trabajando, cosa evidentemente más importante que comentar en el foro cosas que no se deben comentar a la ligera, así que aprovecharé el festivo para dejar unas palabras sobre el tema antes de que más gente se ponga nerviosa, que por ahí arriba leo ya algún comentario muy amable xD
Llevarán no se cuantos años batiendo récords de varios tipos con PS5, vendiendo de cinco millones para arriba en todos o casi todos sus first party, recogiendo premio tras premio, y parece que todo eso no es suficiente para que, en cuanto la cosa baja un poquito, puedan mantener los puestos de trabajo de 900 personas en vez de que cuatro ejecutivos reduzcan su bonus. Y aquí parece que el motivo es bastante claro: los que gestionaban Playstation, con Jim Ryan a la cabeza, son el ejemplo de manual de Excel humano.
Han basado todo su modelo de negocio en un planteamiento donde la consola es puerta de entrada, los exclusivos la zanahoria (sin entender qué son esos exclusivos más allá de lo que le marca el Excel que les hace vender), y reduciendo los márgenes de beneficios de ambos, obtener todo a raíz de los royalties de terceros. El problema es que se ha llegado a un punto donde los exclusivos cuesta hacerlos una barbaridad obscena y necesitas vender cantidades estúpidas de millones para empezar a plantearte que sean algo rentables. Presupuestos de márketing surrealistas y sin sentido que hacen 10 millones de Spider-Man 2 una mala noticia. Que un estudio como Insomniac haga un GOTY contender y se le premie con despidos es inmoral, simplemente. Porque si los estudios más punteros de la industria a varios niveles (ventas, notas, calidad visual, etc...) no consiguen ser rentables, ¿quien lo va a ser?
Estos han visto que el Excel no daba el beneficio previsto, y en vez de plantearse qué han perdido para dejar de darlo, han visto el dinero fácil que son los GaaS y han orientado todo hacia eso...cuando es un mercado que está ya al borde de la implosión. Para que uno triunfe, se te quedan por el camino veinte, veinte que han tenido años de desarrollo, han implicado equipos alejados de lo que saben hacer, implican despidos dramáticos, y que al final no le importan a los jugadores. Véase Suicide Squad como ejemplo de manual de ello.
Y al final, lo que mantiene la sostenibilidad son las producciones bien ajustadas, con presupuestos modestos, objetivos realistas y calidad como carta de presentación. Es hasta irónico como han estado buscando su GaaS invirtiendo morteradas en estudios fantasma, relocalizando recursos en otros estudios que tienen, alejándolos del talento que realmente tienen para meterlos en riesgos...para que al final llegue el más irrelevante de ese conjunto, Helldivers 2, y sea el que se lleve el gato al agua antes que todos los demás. Y por estas cosas los japoneses pueden celebrar un millón de copias como un éxito mientras occidente sufre llegando a unas ventas diez veces superiores.
Como dije en el hilo de los despidos de A/B:
Sobre el hilo, me gustaría recordar que estamos hablando de personas. 1900 personas se han ido a la puta calle. Sean puestos duplicados, más sonyers que Yoshida o hayan cometido errores en los juegos que desarrollaban, siguen siendo personas. Con un recorte del 1% del sueldo de Phil los salvaban a todos.
Cambiad los números y los nombres y os sirve igual. Y algún mensaje más aplicable del mismo modo:
La industria occidental tiene un enorme problema de sostenibilidad que va a terminar reventando por algún lado.

AgumonDX Por mi que le jodan a la empresa, yo me pongo del lado de los trabajadores. La empresa además es una que ha alcanzado un trillón de cotización y máximo de acciones hace nada, reduciendo el bonus innecesario de varios altos cargos salvas esos 1900 empleos.
Todos sabemos que muchos de estos despidos son perfectamente evitables, pero ocurren en el contexto de la búsqueda irresponsable del beneficio infinito de accionistas.
Sony ha llegado a un nivel de estancamiento brutal a nivel creativo. Ha perdido las producciones medianas/pequeñas, sustituidas por acuerdos temporales con juegos de distribuidoras indie como Annapurna o con otros de perfil medio como los exclusivos orientales que han financiado (como el Rise of The Ronin, Stellar Blade). Han lanzado un visor VR y básicamente le han anunciado menos juegos propios que a la PSVita (no hay absolutamente nada de SIE anunciado para 2024 o más allá en PSVR2, y ahora además han cerrado un estudio que hacía VR y recortado el otro, señales muy positivas). Sus mayores highlights han seguido la misma estrategia que la consola: exclusivos temporales, y acuerdos con compañías orientales (en este caso Capcom con el RE8 VR y RE4 VR). Ahí el problema que tienen es que no son el líder del segmento, lo es Meta, que tiene más dinero aún que ellos para asegurar exclusivas. Así que necesitas para diferenciarte una producción propia que no tienen, y su solución ha sido subirlo todo: el Plus, los juegos, la consola (con los packs estafa) y ahora subirla aún más con una Pro muy innecesaria considerando el catálogo.
Sus grandes AAA ya no son sorprendentes, es como el MCU post-fase 3. Han vivido de secuelas expandidas de sus éxitos de PS4 (GoW Ragnarok, Horizon Forbidden West, remasters de TLOU...) y te cuesta ver un motivo "propio" por el que justificar una PS5. Hay muchas IPs clásicas infrautilizadas o sin utilizar. El horizonte a corto-medio plazo es escaso si no consideras lo que han firmado con terceros, y todos esos planes de GaaS cancelados han ralentizado la creación de nuevas producciones que, considerando el coste y los tiempos de desarrollo crecientes, les pueden poner en una situación similar a la Microsoft reciente, donde básicamente estaban pelados de juegos propios. Solo que ahora Sony tiene enfrente a una Microsoft que sí tiene ritmo para lanzar de todo, y Nintendo que va a su bola y consigue mantenerse rentable manteniendo los presupuestos ajustados.
Son otro síntoma más de una enfermedad mayor, que es la insostenibilidad de occidente a la hora de desarrollar superproducciones. Cada vez más caras, cada vez más largas de desarrollar, más costosas de rentabilizar, destruyendo más y más la salud mental de los trabajadores y al final culminando con el premio del despido. Si esto no es una burbuja explotando, poco le falta.