
Pues lo dicho. Salvo que las ventas digitales hayan sido una autentica barbaridad (el pack de los dos juntos estaba a precio del Rebirth), se puede decir que la saga Final Fantasy en japón está bajo mínimos históricos. El favorito de estas listas, Pikmin 4, hizo 400k en su primera semana.
Con Remake tardaron 11 días en señalar la cifra de 3'5 millones de ventas (que fueron según ellos en tres días), y con XVI 6 días en anunciar que llegaron a los 3 (en una semana). De esos 3'5 millones de la anterior entrega de la trilogía 1 millón fueron en tierras japonesas (físicas y digitales).
Las ventas digitales van a tener que decir mucho de si esto es una debacle o algo salvable. Pero lo que esta claro es que al menos, y hablando exclusivamente sobre Japón, es que PS5 no está moviendo software.
Por otro lado, aunque PS5 si ha subido sus ventas con respecto a la semana anterior (que tuvo bajada a 33k), lo cierto es que no consigue superar los 50k y no habrá en un principio un titulo de esta magnitud en todo el año que le de dicha posibilidad. Switch, terminando el séptimo año y sin ningún juego tocho en el horizonte (Peaches?) saca 60k. Muy loco esto.
PD: Añado un poco que esta situación puede repercutir mucho en otros juegos thirds que tienen su importancia en Japón, como pueden ser Monster Hunter o Dragon Quest. Atentos a esto porque pueden haber curvas.