A día de hoy generalmente están separados lo que son hospitales psiquiátricos (agudos) de las residencias psiquiatricas (crónicos), y los involuntarios los revisa un juez periódicamente. Aún así, en un siglo nos llevaremos las manos a la cabeza con lo que se hacía ahora por parte de centros públicos y privados.
La psiquiatría ha cabalgado mucho tiempo junto a la psicología en el campo de lo abstracto, donde se analizaba el comportamiento y se patinaba con el fundamento. Incluso ahora, cuando se asume que los tratornos tienen un origen orgánico aunque se desconozca este, se usan criterios de ingreso que puede que se queden cortos o sean excesivos cuando se eche la vista atrás.
En una sociedad machista y atrasada de finales del siglo XIX sería para ver cómo estaban los pobres internos. Y los tratamientos que les daban. La verdad es que me gustaría verlo si no me quedara en la otra punta de España.