La Davis, desgraciadamente, no le importa ya a nadie y si había cogido algo de importancia era precisamente porque el más grande de la competición había dicho que se retiraba aquí, pero es un torneo de equipo, y el trabajo que se hizo en Valencia y un cuadro bastante light hasta la final se ha ido por el desagüe por anteponer una decisión personal.
El final lógico a una retirada pésimamente gestionada.