Compañeros y camaradas,
En esta época de celebración, deseo expresar un mensaje de gratitud a todos los integrantes de esta distinguida comunidad. Como en todo frente de batalla, el tenis nos enseña a luchar con honor, a enfrentarnos con valor y, sobre todo, a hacerlo bajo el estandarte de la amistad y la camaradería (excepto por cierto farmacéutico y su pupilo). Es esta cancha donde hemos forjado alianzas inquebrantables, en las que el sudor, la pasión y el insomnio se han transformado en respeto mutuo, sin importar la victoria o la derrota.
El enamoramiento por este deporte se ha convertido en el lazo que une nuestras almas, que nos hace seguir adelante cuando el cansancio amenaza con vencernos (DelPo 🫡 ) . Que esta Navidad, al igual que en la cancha, nos encuentre firmes, disfrutando de la compañía de quienes nos quieren, con la esperanza de que el próximo año nos brindará más oportunidades para fortalecer los lazos que nos unen. ¡Feliz Navidad, soldados del tenis!