sora63 Si de campos de concentración se trata, aqui tenemos a Valeriano Weyler durante la Guerra de Cuba.
Weyler, el español que 'inventó' los campos de concentración
Algunos de sus enemigos -entre ellos el propio Blanco- llegarían a cifrar hasta en medio millón las víctimas mortales de su política de reconcentraciones, unos guarismos que de ser ciertos habrían supuesto el exterminio de un tercio de la población cubana, unas tétricas proporciones que no llegó a alcanzar ni la matanza de los jemeres rojos en Camboya. Los estudios más serios rebajan a entre 150.000 y 170.000 el número de muertos, un 10% de la población cubana, una cifra ya suficientemente elevada para valorar la tragedia.
Su actuación durante el año y medio que ejerció como capitán general de Cuba le ha valido para que muchos estudiosos lo sitúen como el precursor de los campos de concentración, una figura que desde entonces ha estado presente en algunas de las páginas más negras de la historia mundial. Así lo concibe, por ejemplo, Andrea Pitzer en Una larga noche (La Esfera de los Libros, 2018), quien considera que, aunque ambos bandos en liza recurrieron a la violencia sin contemplaciones en su lucha, «sólo uno tenía el respaldo de todo un imperio para institucionalizar la hambruna y la enfermedad entre el pueblo».
Y éste señor tiene plaza en Tenerife, en la capital. Ahora, la calle que tenía García-Morato, el máximo as de la aviación española hasta la fecha, también en la capital de Tenerife, cambió de nombre porque fue piloto del bando de los malos durante la Guerra Civil (muriendo en el 39 sin tiempo para hacer alguna perrería mas). Si llega a ser piloto derribando aviones durante alguna guerra colonial, entonces igual si mantenía la calle con su nombre.