Me refiero, para quienes no lo conozcáis, a esto:
Con Nikoderiko tenemos una carta de amor a los plataformas de los 90, dándonos un juego que cumple sobradamente en todos sus apartados.
El set de movimientos es variado pero sin pasarse, lo justo, y responde perfectamente a los controles en una jugabilidad muy pulida y tremendamente divertida.
Gráficamente cumple sobradamente, porque no pretende ser un Alan Wake, pretende ser un platformas colorido, y eso lo consigue con creces, con unos diseños tanto de enemigos como de los protagonistas como de niveles y una presentación tremendamente buenos, un juego que entra muy bien por los ojos.
Los niveles jugablemente también están muy bien diseñados, se hacen divertidos de jugar y están llenos de secretos, y te van lanzando todo el rato gimmicks nuevos que si bien no son siempre originales y ya habremos visto la mayoría en otros juegos están muy bien implementados y hacen que te entren ganas de seguir jugando para ver qué te encontrarás en el siguiente nivel.
También hay que aplaudir su dificultad, porque quiero dejar claro de entrada que no pretende ser un Celeste o un Super Meat Boy o un The End Is Nigh, no pretende ser un plataformas exigente, pero sí que está claro que tampoco es un paseo, el juego propone cierto reto para que hasta los que llevamos 30 años jugando a este tipo de juegos tengamos que estar atentos cuando cojamos el mando.
Y digo que es una carta de amor a los plataformas de los 90, y lo es, pero cuando lo juguéis os daréis cuenta de que es una carta de amor hacia una saga en concreto: Los DK de SNES.
Y es que con su temática selvática y su propuesta claramete os va a recordar la mayor parte del tiempo a las aventuras de Donkey y Diddy y compañía por la 16-bits de Nintendo, el juego no oculta para nada que se basa principalmente en eso, incluso cogiendo conceptos directamente de esos juegos como el montar distintos animales con distintas habilidades, el tener mini-fases dentro de las fases de matar a todos los enemigos o recoger todas las estrellas en X tiempo o encontrar las 4 letras en cada nivel, sólo que esta vez en vez de "KONG" tenemos que recoger "NIKO", el juego es en un 70% un homenaje claro a los DK de SNES.
¿Y el otro 30%? Pues el otro 30% homenajea a los Crash Bandicoot de PS1, porque la peculiaridad que tiene este juego, que sí que no la he visto en ningún otro y me ha parecido muy original, es que tú estás jugando tu nivel 2D a lo DK de SNES tranquilamente y de repente ves que no puedes continuar hacia la derecha, que la única dirección hacia la que puedes continuar es hacia el fondo, y entonces el juego se convierte en un Crash Bandicoot, un plataformas 3D lineal pasillero en el que tanto la jugabilidad 2D como el diseño de niveles 2D se traduce al momento al 3D de una forma tan natural y tan perfectamente implementada que parece magia, y obviamente coge también detalles de Crash Bandicoot como los cogía de DK, como los niveles de persecuciones en los que corres hacia la cámara escapándote de algo.
En fin, que lo jugué ayer un rato y aunque llevo poco, mundo y medio, no he podido dejar de abrir este post para recomendarlo para que todos los que no lo conociérais y os interese su propuesta acudáis raudos a él, porque no os va a decepcionar.
De momento lo tenéis sólo en consolas, eso sí, en todas: PS4, PS5, Xbox One, Series X, Switch... Aunque está previsto que llegue a PC, aunque bueno, yo ya lo estoy jugando en PC por eso de que todo juego que sale en Switch sale también día 1 en PC, aunque como digo tiene página en Steam y en Epic y aunque aún sin fecha está previsto que llegue a PC.
En fin, Nikoderiko, juegazo, si os gustan los plataformas de los 90, sobre todo los DK de SNES y los Crash Bandicoot de PS1, ya estáis tardando, y me dejo un par de broches de oro para cerrar el post:
Música de David Wise y se puede jugar el juego entero en cooperativo local.
Así que nada, Nikoderiko: The Magical World, ya estáis tardando en poneros con él.