La verdad es que la situaciĂłn da lástima. Hasta noviembre Ă©ramos un misil deportivamente y parecĂa que a nivel institucional la cosa se encauzaba, aunque de algĂşn ridi que otro no nos salvaba nadie. Ahora entre ir dando pena a nivel de resultados y Ă©sto, da para escena gore.
Que igual el jugador espera y se queda entrenando seis meses, pero aunque se diese el caso, serĂa haber gastado un pastizal entre fichaje y ficha para que jugase cuatro ratos, ya que ha estado lesionado.