PAL En Intriga en la Corte 1 el esquema era el siguiente: cada turno tenía dos fases, A y B. Cada fase, dos partes (A1, A2, B1, B2).
A1
Un tema propuesto por el máster se debatía en la reunión de consejeros. Por ejemplo, una caravana comercial quería pasar por nuestro territorio, lo cual podía darnos dinero pero también iban armados con muchos mercenarios y podían tramar algo.
O qué hacer para prevenir inundaciones e incendios.
Los consejeros hacían propuestas y se votaba cuáles se aprobaban.
Los votos de los consejeros no tenían todos el mismo valor, dependía de su Influencia. Por ejemplo, la reina tenía 10 de Influencia. El consejero social (servidor) tenía 2.
A2
Los consejeros proponían diferentes temas a tratar. Se votaba (un voto/punto por consejero) y se elegía uno de esos temas a discutir.
A continuación se hacían propuestas y se volvían a votar, de nuevo con el valor de Influencia a la hora de estar a favor o en contra de cada propuesta.
El Reino tenía una ficha que incluía Tesorería (dinero del reino y cuánto ganaba por turno, el que se usaba en A1 y A2) y un medidor de satisfacción y desorden civil en función de las consecuencias de lo que se decidiera en A1 y A2.
La ficha de los jugadores incluía: dinero, dinero ganado por turno, influencia.
El valor de influencia podía variar en función de los sucesos del Reino y de lo que hicieran los consejeros en A1 y A2 (si conseguían aprobar sus propuestas, si se aprobaban aquellas con las que estaba a favor, si se echaban para atrás aquellas con las que estaba en contra, si conseguía que el tema de A2 fuera el suyo...).
Por ejemplo, la reina tenía creo que era 200-300 de oro en efectivo y +60 por turno. Von Snow como consejero social tenía 30-60 y +20? por turno, no lo recuerdo bien.
Aparte, cada ficha podía tener unas entradas de lore: tú has matado al padre de tal personaje, etc.
Y tres objetivos elegidos por cada jugador en secreto, uno fácil de conseguir, otro normal y uno difícil (en teoría, que luego vimos que la dificultad variaba mucho de una ficha a otra).
Al final de la partida, el máster otorgaba puntos según cuánto nos hubiéramos acercado a cumplir los objetivos teniendo en cuenta la dificultad de conseguirlos.
A continuación viene la parte B, que consistía en una acción pública a ojos de todos (B1) y otra oculta (B2). El orden se hacía por sorteo en cada turno.
Se podía hacer: intentar ganar influencia, conseguir dinero, o más dinero/turno, o lo que se te ocurriera (espiar, robar, matar, patrullar...). El éxito de la acción dependía de una tirada 1d20. No había atributos que sumar a la tirada, pero podías gastar dinero para sumar modificadores a la misma (si robas, contratas a un ladrón mejor, por ejemplo).
En todo momento, los personajes podían hablar entre ellos para sus chanchullos por MP.
Y con ese esquema de partida, ya sabéis lo que salió y la que se lio, como si hubiera una deidad oculta facilitando que todo siguiera un guión perfectamente planificado... xD