Un agresor sexual de nacionalidad tunecina abusó sexualmente de una menor de 14 años en la feria de Ciudad Real, ofreciéndole dinero para su silencio.
La Audiencia Provincial de Ciudad Real juzgará el próximo 1 de abril a un individuo magrebí de origen tunecino, identificado como A.S., por los delitos de agresión sexual y prostitución de una menor de 14 años. Los hechos tuvieron lugar durante la feria de la capital en agosto de 2023, cuando el acusado, con antecedentes penales no computables, gestionaba un puesto de venta en el recinto ferial.
El 18 de agosto de 2023, el pederasta inició una conversación con la menor nacida en 2008, mientras vendía bolsos, pulseras y otros artículos. Según el relato de la Fiscalía, el acusado halagó a la joven y le ofreció dinero para que acudiera a su puesto al día siguiente. La menor aceptó y se presentó al mediodía del 19 de agosto, encontrando el puesto cerrado y cubierto con lonas. Una vez dentro, el pederasta la hizo tumbarse en una colchoneta, le bajó la ropa y realizó tocamientos en sus partes íntimas, besándole el cuello y la oreja. Posteriormente, se frotó contra ella hasta eyacular, entregándole 12 euros y «advirtiéndole» que no contara lo sucedido. Durante el acto, la menor lloró, a lo que el acusado respondió: «Para qué lloras si eres muy preciosa para llorar».
La Fiscalía acusa al pederasta de un delito de agresión sexual y otro de prostitución de una niña de 14 años, solicitando una pena de cuatro años y tres meses de prisión por el primer delito y cuatro años de cárcel por el segundo. Además, se piden medidas adicionales como la inhabilitación para cargos públicos y profesiones que impliquen contacto con menores durante 12 años, libertad vigilada por tres años, prohibición de acercarse a menos de 200 metros de la víctima o comunicarse con ella durante siete años, y su expulsión del territorio nacional tras cumplir los primeros cuatro años de condena. También se ha solicitado una indemnización de 3.000 euros por daños morales.
Durante el juicio, se llevarán a cabo diversas pruebas, incluyendo el interrogatorio del acusado, la declaración de testigos —entre ellos la víctima, cuya declaración se reproducirá mediante una grabación—, y los informes periciales de los forenses que analizaron las pruebas biológicas. Asimismo, se revisarán los informes médicos y el atestado policial.
