Si eres una desarrolladora indie puede que eso funcione, es tu dinero y lo arriesgas como quieres. De hecho me parece el enfoque correcto para juegos que deben compensar sus ajustados recursos con ideas brillantes y bien ejecutadas, y sacar la cabeza del nido con esa filosofía puede ser un acierto.
Pero fuera de un escenario independiente, en juegos AA y AAA, la cosa no funciona así por muy bonito que suene. No puedes ir a un inversor para proponerle proyectos que cuestan decenas de millones y convencerle con ese mantra romántico de que vas a hacer un juego que te guste jugar a ti independientemente sin importar de si le va a gustar a quien tenga que comprarlo, porque te va a mandar a pastar 9 de cada 10 veces. Se le han alineado los planetas, pero porque ha coincidido que lo que quería jugar él lo quería jugar el mercado.