Anoche la vi y en verdad es desoladora. Como la vea alguno de esos que siempre dicen "como haya guerra, quiero morir el primero", no va a hacer más que reafirmar su postura. 
El toque realista que toma, casi de documental, funciona muy bien. No se echa en falta mucho más presupuesto, salvo un par de planos en los que canta de más el maquillaje. En ese aspecto se muestra inteligente, sacando petróleo para ser un telefilm.
Aquí se dejan a un lado los típicos héroes de la peli, e incluso el politiqueo. Se centra en la influencia en el día a día de la población civil y en lo que se podría llegar a alargar un sufrimiento miserable. Es una de esas pelis que debería dar que hablar en los institutos.