Rafster
Tecnológicas a las que dejan externalizar ese proceso de verificación a terceros de vete-a-saber-tú-qué-país, con el riesgo añadido que eso supone.
Y no hablo sólo de países marginales en los que se pasen las leyes por el forro, muchas empresas de verificación son de EE. UU. y, gracias a su "maravillosa" Ley Patriótica, el gobierno americano está capacitado para pedirles a esas empresas que compartan los datos de los usuarios.