Lamine ya ha sido más prepotente de lo que va a ser Vinicius en toda su carrera.
Vinicius no es santo de mi devoción pero tiene un problema serio con no caer en provocaciones y eso le pasa factura cuando campo al que entra campo que va a por él, con los jugadores y aficiones rivales buscándole también porque saben que salta y lo sacan del partido, y los jugadores a parte de insultos constantes, le suelen repartir leña para potenciar la frustración. Suele pasar en Liga y sobretodo jugando fuera de casa, los partidos de Bernabéu o europeos en los que nadie lo busca, por lo que sea, no se suele liar ni con la afición rival ni con los jugadores del otro equipo. Ni se autopone coronas marcando solo a colistas ni sale en streams insultando al Barcelona como institución. Solo se le puede sacar el tweet de Eu Farei que para variar lo hace tilteado y para provocar a los haters que vivían para joderlo.
Lamine es prepotencia, arrogancia, creerse el mejor sin serlo, autodenominarse ganado perdiendo los partidos importantes, provocar a aficiones que no le están haciendo nada a él en concreto y que pitan una simple decisión arbitral que les perjudica, ensayar celebraciones características de futbolistas con los que se enfrenta para hacer la misma si mete con el único fin de faltar al respeto.
A decir verdad después del ridículo del Clásico y tras ser trending topic a nivel mundial con cuentas de memes y webs sobretodo de habla inglesa riéndose de él y del Barcelona se le veía más tranquilo, la celebración de la corona por lo que sea ya no tiene ganas de hacerla pero ha durado poco.
Imagino que los culés lo odiarán por arrogante como a Cristiano.