lungux
Mi jefa es experta catadora de vinos y siempre nos hace un cata grupal cuando quiere incorporar nuevos vinos a la carta cada X meses para ver qué nos parecen. Siempre suelta lo de las notas, que si madera, que si cuero, etc.
Uno de los vinos que una vez estuvo barajando añadir a la carta, no es ya que no estuviera bueno, es que olía como a podrido, a vómito o qué sé yo. Nadie dijo nada hasta que se lo solté, pidiéndole por favor que ni se le ocurriera añadirlo (imagina que tenemos un par de clientes en una cita romántica y se llevan la copa a la nariz antes de beberlo... experiencia arruinada). Lo bueno es que nos descubrió una curiosidad, y es que esa clase de vino que tan mal huele es para servirlo en cáliz de cobre, porque hace una reacción química al contacto con ese metal. Para demostrarlo metió un penique en la copa de vino y esto hizo desaparecer el olor 😮