Meldrel
---Bien, no creo que nos cause problemas. La joven está bien, por cierto. Nada que un par de copas y descanso no pueda curar. Pero está claro que, si no hacemos algo, no volverá a confiar en nosotros, y nuestra reputación puede verse seriamente afectada. Pasemos ---os abre la puerta del despacho.
"En su interior está el jefe, leyendo el periódico del día en busca de algo interesante, o preocupante, sobre su familia."
---Benvenuto. Vayamos al grano, pues el tiempo corre en nuestra contra. Normalmente ---se acomoda y cierra el periódico---, dependiendo de las habilidades de nuestros chicos, les asignamos una u otra tarea, y estimamos el tiempo y los recursos que necesitarán. Pero vosotros sois nuevos, y aunque por ahora vais muy bien, no tenemos claro qué debéis hacer. Por un lado, el asunto del senador, conseguir su voto para mañana por la tarde. ¿Es importante? Sí, pero quizás no esencial, puesto que si conseguimos todos los votos que pretendemos, nos sobrarán. Por otro lado, el asunto de la ragazza: un ataque así no puede quedar sin respuesta. Toda nuestra organización se verá salplicada por una mala reputación sino actuamos con contundencia. No solo han atacado a nuestro territorio y a una protegida, sino que han roto la tregua, malfattores...
---Lo que quiere decir el Don ---interivno Alfonso---, es que dejaremos que toméis vosotros la decisión. Si creéis que en las próximas 36 horas podéis castigar a los irlandeses y conseguir el voto del senador... bueno, habréis demostrado ser de gran valía. Si solo conseguís una de las dos cosas, no habrá problema, es lo esperado. Si no conseguís ninguna... mejor no hablemos de esos supuestos y de sus consecuencias.