La empresa Oceangate informa de que están trabajando para traer a su tripulación de vuelta
Un submarino que exploraba los restos del Titanic con turistas a bordo desapareció durante una expedición este fin de semana, según ha confirmado OceanGate Expeditions, la dueña de la nave. Un portavoz de los guardacostas de Boston ha señalado que en el sumergible viajaban cinco personas y que ya han iniciado la operación de búsqueda en aguas del Atlántico Norte.
De momento, las autoridades de Massachusetts no han confirmado la identidad de los desaparecidos en el sumergible. También se desconoce la nacionalidad de los turistas de a bordo. La empresa, que opera desde St. John, Terranova, en Canadá, indicó en un comunicado que están "explorando y movilizando todas sus opciones para devolver sana y salva a la tripulación", además de explicar que están enfocados en "los miembros de la expedición y sus familias".
Han agradecido además la colaboración de las autoridades de "distintas agencias gubernamentales" y compañías especializadas en esta clase de exploraciones "para reestablecer contacto con el sumergible". Los guardacostas canadienses indicaron a la cadena CBS que la operación de rescate está siendo dirigida por el Centro de Coordinación Regional de Boston, puesto que esa parte del Atlántico les corresponde por jurisdicción.
En el portal de la compañía, aparentemente colapsado por la cantidad de visitas en las últimas horas, se ofrecen paquetes turísticos de siete noches hasta los restos del Titanic por 250.000 dólares. Lo que queda del transatlántico, que se hundió en las gélidas aguas del océano el 15 de abril de 1912, está a 3.800 metros de profundidad y a más de 600 kilómetros de la costa de Canadá.
El hundimiento tras chocar contra un iceberg se cobró la vida de 1.514 pasajeros de los 2.224 que viajaban desde Southhampton hasta Nueva York. OceanGate había comenzado sus particulares aventuras hacía dos años con un sumergible, el Titan, el único diseñado para cinco personas capaz de llegar hasta esa profundidad en esta parte del Atlántico, de acuerdo a un periodista de CBS que lo pudo experimentar de primera mano el año pasado.
Lo describió entonces como una nave con un espacio similar al de una furgoneta con algunos componente improvisados, como un mando de videojuegos que se usaba para pilotar el sumergible. Clientes no le han faltado, la mitad obsesionados con el Titanic y la otra mitad interesados por las profundidades del mar. En su web lo venden como una oportunidad de seguir "los pasos de Jacques Cousteau" y convertirse "en un explorador submarino, comenzando con una inmersión a los restos del Titanic. Esta es su oportunidad de salir de su vida cotidiana y descubrir algo realmente extraordinario. Conviértase en uno de los pocos en ver el Titanic con sus propios ojos".
La actual expedición estaba prevista para el 12 de junio y hasta el 20, con un máximo de seis turistas por expedición y partiendo de la pequeña isla al este de Canadá. Un ciudadano británico que iba a ser parte de esa expedición indicó a través de redes sociales que el invierno en Terranova había sido especialmente duro y que por eso era el único viaje del año previsto hasta los restos del Titanic, según informa el diario The Guardian.
https://www.elmundo.es/internacional/2023/06/19/64905d13fc6c8365598b4580.html