Laolama Es su palabra contra la de Jim Ryan, ¿por qué tenemos que asumir que dice la verdad cuando probablemente sea accionista y le interese cerrar la compra? Y más si está ahí por Kotick, que sería capaz de vender a su madre por dinero.
Y dios me libre de defender a Jim Ryan, pero seamos serios. No se puede aceptar la palabra de una persona con intereses en el acuerdo sin prueba alguna como algo factual. Supongo que por hablar de manera lógica me convertiré en un fanático de Sony, pero solo intento poner cordura en todo este circo, porque es en lo que se ha convertido este proceso. El último ejemplo es tener a los sospechosos habituales (Tom Warren y Jez Corden, el segundo de ellos cobrando directamente del medio de filtración oficioso de MS, como es Windows Central) manipulando y sesgando un documento destinado a reguladores para agitar el avispero, tomando la prensa sin ningún atisbo de pudor o rigor periodístico dicho sesgo para hacer las noticias.