Juro que hace 2 días, el viernes por la tarde, me instalé Telegram para entrar en algunos grupos que me interesaban, a menuda hora decidí bajármelo.
Esto me parece surrealista, multinacionales tochas pudiendo juntarse para cerrar a otra empresa simplemente porque les supone una amenaza comercial.
Y más surrealista me parece que un juez haya accedido a concederles esto, que es como si le cerrasen el bar a Paco sólo porque Hakim ha decidido vender cocaína en su lavabo, a saber con cuánto habrán untado a ese juez.