Isolee No tiene razón. No es ella quien debe definir el tipo de servicio o la temática del local. Si los propietarios quieren algo concreto, como camareros parlanchines o temática de Hello Kitty, están en su derecho. Si no le gusta ya sabe lo que tiene que hacer, será por baretos convencionales.
Eso tendrían que haberlo dejado claro antes de contratarla, como una de sus tareas. El hecho mismo de que aún le cueste desenvolverse con el idioma ya era indicativo previo, en el momento de su contratación, de que no iba a poder desempeñar esas labores.
Lo que habrán pensado es que es mona y que quieren usarla como gancho sexual de cara a los viejos borrachos de la barra (un clásico). Lo que pasa es que no se lo podían exponer así en la entrevista de trabajo y ahora se estarán arrepintiendo al ver que no está por la labor.
Y repito lo de que si es camarera no es su trabajo servir en la barra, del mismo modo que los que están contratados como bartenders pueden negarse a salir de la barra para servir bebidas (por ejemplo, si ha faltado un camarero y están un poco en la mierda en sala). En mi restaurante los bartenders suelen echar una mano en ese aspecto, pero yo no puedo exigírselo, al punto de que hay uno que se "aprovecha" y aunque nos vea en la mierda es capaz de quedarse destrás de la barra, literalmente, de brazos cruzados mientras nosotros estamos claramente desbordados (repito que al ser bartender cobra más por hora que los camareros con similar experiencia, aunque suela hacer la mitad de esfuerzo). Es lo que hay.