Kset Aparte, Nintendo tuvo el mismo problema que con Wii U: ninguno de los dos artilugios (estereoscopía y tabletomando) funcionaba bien. Eran cosas que, a corto plazo, ya cansaron mucho. Nada que ver con la doble pantalla de DS o el giroscopio de Wii. O la facilidad de pasar de la tele a portátil de Switch.
3DS acabó salvando los muebles, sí, pero el inicio fue durísimo y estuvieron a punto de liarla. Afortunadamente supieron salir de ahí. En buena medida porque Sony, lejos de aprovecharlo, se suicidó en ese terreno.