La actriz que va a hacer de Moana creo (creo!) que es la que dobló al personaje en su día.
De todas formas, temas de blackwashing y movidas de estas aparte, lo que está claro es que Disney en su animación no ha tenido un éxito rotundo desde los 90, y que va tirando de aquí y de allá con los live-action a ver si suena la flauta o le son al menos mínimamente rentables.
La factoría de las ideas está sumida en una crisis creativa desde hace lustros, y principalmente se beneficia de ideas pasadas o de franquicias de terceros, y es algo que no le durará eternamente.
Y yo que me alegro.