Ni siquiera tenemos que referirnos únicamente a los eventos históricos de mayor magnitud, que a menudo sin también los más documentados, sino a los que también son famosos sin por ello gozar de tantísima relevancia.
Saco el tema a colación de la reciente paliza que Topuria le ha metido al Holloway. Algunos pensaréis, ¿qué tiene que ver la pregunta del hilo con una pelea de MMA? Bastante. No tanto por la pelea como tal, pugilísticamente hablando, sino por el fenómeno que surge a partir de ella y que se aprecia, en toda su magnitud, en Internet: cada uno ve lo que quiere incluso cuando las pruebas son concluyentes.
¿Cómo es posible que en 2024, con documentación grabada en imagen y vídeo, incontestable, indiscutible, que está ahí y todos podemos ver, haya miles y miles y miles de personas poniendo -con la intención de maquillar inútilmente la realidad- que Max estaba dominando la pelea y hasta iba a ganar pero tuvo mala suerte? Lo mismo que dijeron con Volk, por cierto.
Hablamos de una pelea que está grabada. De una pelea en la que vemos cómo Holloway come hostias durante dos rounds enteros. En la que vemos cómo se traga un puñetazo a caraperro en la boca y cómo en el minuto 2 está respirando por la boca prácticamente muerto en su esquina, para salir y en menos de 1 minuto estar tirado en la lona con un cortocircuito en el mentón. Y pese a todo, pese a las ventajas que nos brinda la tecnología, pese a disponer de pruebas irrefutables de lo que ha sucedido, tienes a miles de personas dispuestas a negar la realidad y contar una versión alternativa de los hechos objetivos.
Esto no sólo pasa aquí. Pasa también en el fútbol, pasa en la política, pasa en todo. La pregunta es simple. Si hoy, disponiendo de la tecnología de que disponemos que nos permite grabar lo que nos salga de los cojones para que la opinión de la gente no valga de nada y podamos remitirnos a las pruebas, AÚN ASÍ la gente intenta inventar su propia versión de la realidad, ¿qué tan diferente será la historia de lo que nosotros conocemos oficialmente considerando que no se podía grabar nada hasta hace dos días y que todo lo que tenemos son pruebas documentadas a papel y lápiz? ¿Cuántas palizas habrá comido gente cuyas gestas luego fueron maquilladas como que estuvieron a punto de ganar o, qué coño, incluso que vencieron?