Las Estatuas de los Condenados siguen susurrando, sus voces solapándose, reptando en la mente de Milly y Pizz como una plaga de gusanos invisibles. Pero mientras Milly ni se inmuta, convencida de que el mundo le debe cada bocanada de aire que respira, Pizz lucha contra el veneno de las palabras.
El cuchillo sigue en su mano.
La idea sigue ahí, como un eco, como un rumor en el fondo de su cráneo. Su madre lo abandonó. Elisa prefirió a otro. Todos lo han despreciado, lo han visto como menos que nada.
Pero entonces, su otra mano se aferra con fuerza a su entrepierna y recuerda quién es.
Pizz no es menos que nadie. Pizz es el héroe de Pizz.
Con un gesto desafiante, se planta frente a las estatuas y proclama con orgullo:
"¡Comedme lo más grande si queréis, hoy no es el día! Hoy, Pizz supera otra prueba más."
Y entonces, sucede algo inesperado.
Las estatuas se quedan en silencio.
Un susurro suelto resuena en la negrura.
"¿Y ahora qué?"
"No lo sé, ¿por qué no ha funcionado?"
"Quizás debimos ser más sutiles."
"¿Más sutiles? ¡Pero si le hablamos directamente a sus inseguridades!"
"A lo mejor no era lo bastante inseguro."
"¡Es un goblin, claro que es inseguro!"
"Pues parece que no lo suficiente."
Los susurros empiezan a convertirse en discusión abierta.
"¿Y qué hacemos ahora?"
"No sé, ¿decirle que su grupo lo odia?"
"Ya lo hicimos."
"¿Recordarle que su amor lo abandonó?"
"Eso también lo hicimos."
"¿Que nunca conseguirá ser alguien importante?"
"¡Se cree importante!"
Las voces se elevan, perdiendo todo rastro de misticismo maldito y sonando cada vez más como una discusión de taberna.
"Pues entonces que se tire al río él solo, qué más da."
"¡No va a saltar, ya lo ves!
"¡Pues pon otra voz más trágica, que suene más convincente!"
"¿¡Tú crees que es fácil!? ¡Llevo siglos haciendo esto y ni una puta vez he tenido que lidiar con un goblin sobándose los huevos mientras le hablo!"
El murmullo se vuelve un caos de reproches entre las estatuas, olvidando por completo a sus víctimas.
Mientras tanto, la balsa sigue su curso, alejándose de la absurda escena.
Drek silba para sí mismo, divertido.
"Hsss… Nunca falla. Nada frustra más a un espíritu atormentado que no tomárselo en serio."
Y con eso, sigue remando como si nada hubiera pasado.
La balsa sigue deslizándose por el río subterráneo, dejando atrás los susurros airados de las Estatuas de los Condenados. El túnel se estrecha nuevamente, y el aire se vuelve más espeso, más húmedo. Un hedor agrio flota en el ambiente, como agua estancada mezclada con algo peor… algo en descomposición.
Drek detiene el avance de la balsa con un golpe seco de su bastón.
"Hsss… abrid los ojos, carne de superficie. Este tramo es peor que las palabritas de los muertos."
Su hocico vibra al olfatear el aire.
"Oozes. Limos. Criaturas sin forma y sin hambre, pero que devoran igual."
El agua delante de ellos burbujea, como si algo respirara bajo la superficie. Una capa viscosa flota sobre el río, pegajosa y resplandeciente con un tono enfermizo bajo la poca luz. En las paredes de la caverna, manchas gelatinosas se aferran a la piedra, palpitando con vida propia.
"Hsss… no son rápidos, no tienen ojos ni oídos… pero sienten."
Drek clava su bastón en la balsa y se cubre con su capa hecha jirones.
"Si caéis al agua, no quedará nada de vosotros para rescatar."
Entonces, algo gotea del techo y cae pesadamente sobre la balsa con un sonido húmedo. Un charco de baba ácida se esparce, chisporroteando al tocar la madera.
El limo se contrae, palpita, y se alza en una forma grotesca y temblorosa.
De pronto, un siseo burbujeante llena el túnel. Uno de los limos se hincha, vibra… y escupe.
Un chorro de ácido silba en el aire, directo hacia Drek.
El hombre rata salta hacia atrás con una agilidad sorprendente, su bastón golpeando la madera para impulsarse. El ácido impacta donde estaba hace un segundo, perforando la balsa como si fuera pergamino mojado.
"¡Hsss! Yo avisé, yo avisé."
Drek se encoge en su rincón, sujetando su bastón con fuerza, pero sin mover un solo dedo para ayudar.
"No se lucha contra el agua podrida, se le sobrevive."
La corriente se agita, y más burbujas suben a la superficie. Un limo más grande repta por una de las paredes, como una sombra pegajosa y maldita, deslizándose hacia ellos con un movimiento nauseabundo.
"¡O salimos de aquí o nos disolvemos en un buen caldo!"
Otro chorro de ácido impacta cerca de Milly, silbando al evaporarse sobre la madera.
La balsa se tambalea, la madera cruje. Si no maniobran rápido, no habrá nada en qué mantenerse a flote.
Todo depende de su agilidad.
Un nuevo limo se hincha y escupe, el sonido es un siseo burbujeante que corta el aire.
Pizz ve el destello verdoso de refilón y su instinto actúa antes que su cerebro. Se abre de piernas en el último segundo, más rápido que nunca en su vida.
El chorro de ácido silba entre sus muslos, rozando su entrepierna.
Pizz abre unos ojos desorbitados, paralizado por un instante, mientras el aliento se le queda atrapado en el pecho.
Lentamente, con un temblor, baja la mirada.
Todo sigue en su sitio. Entero. Intacto.
El ácido impacta en una roca de la pared detrás de él, que chisporrotea y se deshace en un pequeño derrumbe.
El goblin traga saliva, palideciendo más de lo normal.
Drek suprime una risilla, sin dejar de remar.
"Hsss… afortunado, pequeño verde. Unos centímetros más, y hablarías con voz de doncella el resto de tu vida."
Otro limo se hincha y escupe, su ácido surca el aire con un siseo mortal.
Tirada: 2, 1. Gasto de Fortuna. Tirada: 4, 3
Milly intenta apartarse, pero la balsa se tambalea, y el chorro roza su hombro.
El ácido chisporrotea, devorando la tela en cuestión de segundos. El tirante de su vestido se deshace, y antes de que pueda reaccionar, la tela cede, dejando uno de sus pechos al descubierto.
Drek alza una ceja, sin dejar de remar.
"Hsss… mira tú. El limo tiene buen gusto."
Pizz, aún recuperándose de su propio encuentro con el ácido, parpadea al verla y suelta un silbido.
La salida sigue allí, al fondo.
Cada vez más cerca.
Si no llegan pronto, lo siguiente que se disolverá no será solo la ropa.
Volved a tirad Agilidad, salvo que hagáis otra acción.