Desde su anuncio en 2020 durante el evento de presentación de PlayStation 5, Pragmata ha sido uno de los proyectos más enigmáticos en el horizonte. El misterioso juego ha sido retrasado varias veces, lo que llevó a algunos a temer que Capcom tuviera otro Deep Down entre manos. Afortunadamente, no es el caso: Pragmata es real y, tras jugar 30 minutos durante el Summer Game Fest Play Days en Los Ángeles, estamos ansiosos por saber más sobre esta aventura de ciencia ficción.
El juego tiene como protagonista a Hugh Williams, un astronauta enviado con un equipo para investigar una estación de investigación lunar llamada The Cradle después de que esta quedara misteriosamente en silencio. Al llegar, un terremoto devasta las instalaciones y lo deja incapacitado. Afortunadamente, es rescatado por Diana, una androide con apariencia de niña, que lo repara. La demo comienza después de que Diana logre poner a Hugh de pie, y ahora ambos deben enfrentarse a una estación espacial infestada de robots letales y una IA hostil para regresar a la Tierra.
Pragmata es un shooter en tercera persona con cámara sobre el hombro, pero con un giro gracias a Diana (que viaja a cuestas sobre la espalda de Hugh). Disparar a los robots causa poco daño debido a su blindaje, pero Diana puede hackear a los enemigos para inmovilizarlos temporalmente y exponer su circuito interno, lo que permite a Hugh dispararles. El hackeo es un minijuego en el que los jugadores apuntan a los enemigos y luego usan los botones frontales como si fueran un D-pad para navegar por una interfaz de cuadrícula. El objetivo es guiar un cursor hasta un recuadro verde para completar el hackeo, pero se deben atravesar tantos recuadros azules como sea posible en el camino.
Esto recuerda a marcar números en un teclado telefónico (bastante grande), y la clave está en encontrar la ruta óptima al cuadro verde, ya que algunos cuadros están bloqueados. Como el hackeo ocurre en tiempo real —el juego no se detiene, así que los enemigos siguen atacando— hay que hacerlo rápidamente para detenerlos antes de convertirlos en chatarra. Esto crea un ritmo divertido y frenético durante el combate, mientras uno intenta completar el hackeo esquivando ataques. Algunos nodos especiales otorgan habilidades adicionales al hackeo, y activarlos en conjunto potencia su efecto. Por ejemplo, los nodos amarillos reducen la defensa del objetivo hackeado. Se pueden omitir estos nodos especiales, pero el esfuerzo extra para activarlos puede valer la pena.
Como Hugh, utilizamos una pistola estándar llamada Grip Gun, un arma tipo escopeta llamada Shockwave Gun, y una red de estasis (Statis Net), que atrapa enemigos en un campo de energía, dando una ventana para hackearlos sin interrupciones. El "gunplay" se siente bien, y los robots explotan en una lluvia satisfactoria de piezas. Cuesta un poco acostumbrarse, pero el ritmo de hackear y luego disparar tiene buena pinta, añadiendo una estrategia basada en reflejos al combate tradicional.
Explorar la sección relativamente lineal de The Cradle se ve facilitado por un escáner que apunta hacia el objetivo y también resalta objetos coleccionables. Estos incluyen cartuchos de reparación para recuperar salud (de los cuales se puede llevar una cantidad limitada), entradas de diario y mensajes holográficos del equipo de The Cradle. Para acceder a áreas bloqueadas o resolver acertijos, se requieren diferentes tipos de minijuegos de hackeo, como presionar una secuencia correcta de botones en pocos segundos. Entre la acción, disfrutamos del intercambio entre Hugh y Diana. La personalidad inocente y juguetona de Diana es encantadora, y Hugh, a quien esperaba ver como un tipo rudo en contraste, resulta ser bastante amable e incluso divertido ante la presencia de Diana.
Este pequeño vistazo a Pragmata alivia algunas preocupaciones sobre el estado del juego, y nos está gustando la mezcla de hackeo y disparos. Tendremos que esperar hasta 2026 para ver cómo Hugh y Diana logran regresar a la Tierra, pero estamos dispuestos a dejar que Capcom siga cocinando tras esta primera impresión tan prometedora.