Kuga Añado un detalle curioso a esa historia: siglos después, un ruso descubrió el origen de dichas criaturas chinas y las popularizó entre sus compatriotas. Se trataba de Aleksander Indenéimov, explorador que recorrió exhaustivamente la frontera entre Rusia y China (y en algunas de sus obras también documentó numerosos preceptos luditas; odiaba a las máquinas). Desde entonces, en algunas regiones asiáticas se conoce a esas bestias mitológicas como "Qilin Indenéimov".