El otro lastre de la vivienda: no hay quien la construya y el 65% de los albañiles tiene más de 45 años
Javier Cebollada
6-7 minutos
Nicolás Ardila Madrid
PREMIUM
Actualizado Viernes, 20 junio 2025 - 22:48
A la crisis de vivienda que atraviesa el país se suma otra: la que sufre el propio sector de la construcción, que se ve incapaz de atraer a los jóvenes. La edad media de sus ocupados es de las más altas del país, 45,1 años, y la llegada de extranjeros, aunque alivia, todavía está lejos de corregir esta situación. El 65% de los albañiles en España tiene hoy más de 45 años, 15 puntos por encima de la media de otros sectores de la economía.
La incorporación de inmigrantes está siendo una tabla de salvación para la construcción, pero aún no consigue cubrir la falta de mano de obra ni el mencionado problema de envejecimiento, según un informe de BBVA Research. El sector, que aporta un 5,4% del PIB español, acusa una falta de mano de obra que no para de agravarse y que podría ser la causa que más está dificultando que los empresarios ejecuten sus proyectos en todo el país.
Los puestos vacantes en el sector de la construcción han aumentado significativamente en los últimos años y es la actividad donde más trabajos hay sin cubrirse, según el informe que presentó hoy BBVA Research. «No hay trabajadores. Hay obras paradas esperando a que haya mano de obra disponible», asegura el secretario general de la patronal del sector de Alicante, Jesualdo Ros.
SE NECESITAN 700.000 TRABAJADORES
El número de ocupados en el sector se encuentra muy por debajo del promedio de los últimos 30 años. En marzo de 2025 los trabajadores del sector de la construcción representaron el 6,8% del total de ocupados en la economía española, 2,1 puntos menos que el promedio. Con esto, la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) asegura que hacen falta 700.000 trabajadores en el sector para ejecutar la alta demanda. «La falta de trabajadores cualificados amenaza tanto los objetivos de España en materia de vivienda como las infraestructuras del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia», afirma el presidente de la CNC, Pedro Fernández.
En comunidades como Extremadura, el problema de la escasez de la fuerza laboral en la construcción se hace visible. La Junta de la región extremeña anunció el pasado febrero la construcción de 3.000 viviendas de protección civil. Sin embargo, Jaime Gridilla, miembro de la directiva de CNC Extremadura, advirtió que «se necesitan tres o cuatro trabajadores por vivienda, por lo tanto, para construir 3.000 inmuebles residenciales, serán necesarios otros 10.000 trabajadores».
FUTURO CRÍTICO
La escasez se suma al problema del envejecimiento: más del 55% de los ocupados son mayores de 45 años, donde la edad media del sector se encontraba en 2022 en los 45,1 años, 8 años más que la media de 2007. «El sector renueva antes su mano de obra envejecida que su mano de obra joven en uno de los países con los paros juveniles más altos de Europa», añade Pedro Fernández.
Los jóvenes no se interesan por la construcción. Se embarcan en estudios superiores y se especializan en diferentes sectores de la economía, por lo que la construcción se queda con un vacío perenne de puestos, problema que se hará más evidente en los próximos años. «España ha sufrido una disminución en las inscripciones en formación técnica, lo que unido al envejecimiento de la fuerza laboral y la falta de atractivo del sector para los jóvenes está provocando una situación que, si no se combate a tiempo, resultará crítica en el futuro», asegura SílviaBalcells, directora general de Synergie en España. Sobre esto, coincide Fernández: «El problema lo tenemos en la captación; es ahí donde seguiremos trabajando para acabar con la injusta demonización de nuestra imagen que provocó la crisis financiera de 2007».
SOLUCIONES
Para cubrir esta alarmante falta de mano de obra, que sobre todo están sufriendo las pequeñas y medianas constructoras, la CNC propone regularizar inmigrantes y atraer trabajadores del exterior. «Pedimos un completo Plan de Choque que promueva la reforma de la FP, la regularización de inmigrantes por arraigo y fomente la contratación de jóvenes y mujeres», añade el presidente de la organización de constructores. Para ello, la patronal sugiere dar formación a los inmigrantes para lograr arraigo en España, una medida que, según dicen, serviría para luchar contra la economía sumergida.
Afirma también que se debe focalizar en la incorporación de mujeres al sector, quienes no obstante, ya representan el 11,4% del total de trabajadores -un 3,6% más que el año anterior-.
«En definitiva, la construcción debe seguir trabajando para demostrar que se trata de un sector moderno, dinámico y flexible; un sector que gracias a su apuesta por la formación y la tecnología debe ser capaz de atraer a los jóvenes que necesita», finaliza Fernández.
Precisamente, el PSOE desbloqueaba la regularización de medio millón de inmigrantes el pasado mayo, tras una propuesta que llegó al Congreso de los Diputados gracias a 700.000 firmas ciudadanas a través de una Iniciativa Legislativa Popular (ILP). La iniciativa fue impulsada por unas 900 organizaciones, pertenecientes a un amplio y diverso espectro ideológico, lo que reflejaba un consenso poco habitual en el panorama social y político. Durante meses, sus principales promotores trabajaron con la idea asumida de que el PSOE respaldaba la propuesta, o al menos no se opondría a ella.
Todo cambió al detectarse las carencias del nuevo reglamento de Extranjería, y más aún por la creciente demanda de mano de obra poco cualificada en España. Según la Fundación de las Cajas de Ahorros, Funcas, desde 2022, el 40% de los nuevos trabajadores incorporados al sistema productivo son inmigrantes. Las empresas necesitan cubrir empleos que los españoles ya no aceptan, ni en los sectores ni en aquellas zonas donde más se requieren.
Fuente:
https://www.elmundo.es/economia/2025/06/20/68557d66e4d4d8ba388b45af.html
