Igual que la primera temporada me pareció que estaba bien, pero un poco inflada por la crítica, la segunda de The Bear me ha parecido una maravilla. Se nota mucho la apuesta de Disney por ella en forma de presupuesto.
Se toma ciertas licencias y alguna que otra escena para forzar el avance de la trama, pero lo que se propone, que es diversificar la historia, profundizar en cada personaje del elenco y picotear de más géneros más allá de la comedia dramática, lo hace a la perfección.
La fotografía, soundtrack, la química en pantalla de la pareja, el clímax de la cena de Navidad desde que se sientan a la mesa, el capítulo del primo Richie, el plano secuencia inicial del último...Tiene cosas muy, muy top.
Solo chirría lo jodidamente insoportable que es el personaje de Sydney.
Me da miedo que ahora, ya consagrada, estiren el chicle más de la cuenta. La serie no debería tener más de otra temporada con la consecución de la primera estrella del restaurante y la consiguiente redención de Carmy.