Qué decir, señores, se nos ha ido un tío genuino como pocos, por su personalidad, por su arte, por su filosofía, incluso por las pintas que nos llevaba en el escenario, más allá de todo eso para mí ha sido un brujo, un chamán, ha sido fundamental en mi vida y fuente de inspiración inagotable, pensar en él hace que note que algo está ejerciendo autoridad sobre mi, así que me quedo con eso, con la sensación de gratitud y profundo respeto hacia su persona.
Robe, ya arreglaremos cuentas.