A mi ese periodo de tiempo me parece excesivo. En mi caso personal, mi otorrino me dijo que mínimo debía de ir dos veces al año. Tengo el conducto auditivo muy estrecho, y por ello, propensión a tener tapones. Además, la cera encima no es de las blandas, sino que se pega a las paredes. La útlima vez que fui el hombre tuvo que hacer un esfuerzo para quitármela, con la consiguiente erosión y daño posterior.
Antes me aseaba con frecuencia para quitarme la cera. Ahora lo que hago es no esforzarme en demasía porque me preocupa que la situación se complique. Así pues, limpio la cera que va saliendo de manera natural y listo.