Nintendo sí trató de mantener viva a Wii U con juegos y muy fuerte además. Sacó Mario Kart 8, Xenoblade X, Mario 3D World, Pikmin 3, Tokyo Mirage Sessions, Bayonetta 2, Star Fox Zero, Smash Bros, New Super Mario Bros U y su expansión de Luigi, Kirby, Donkey Kong Country Tropical Freeze, Zelda BotW, Yoshi Woolly World, Game and Wario, Captain Toad, Paper Mario, Nintendo Land, Zelda TP/WW HD, Splatoon, Hyrule Warriors, Mario Maker, Wonderful 101, Pokken Tournament...
Hablamos de una consola que salió a finales de 2012 y para inicios de 2016 ya estaba Nintendo dándola por muerta y anunciando que Switch salía en 2017. Realmente fueron muchos juegos para prácticamente 3 años de soporte. En ese aspecto poco o nada qué reclamarle a Nintendo.
Fuera del catálogo de juegos Nintendo lo hizo fatal. Desde el anuncio de la consola donde el foco se centró en el puto mando-tableta, casi todos pensábamos que Wii U era eso, el puto mando y/o era una extensión de la Wii. Ya luego tuvo eventos random como el año de Luigi y el E3 del 2015 que fue el peor de Nintendo en su historia con el Federation Force y el Animal Crossing.