El marino que perdió la gracia del mar, de Yukio Mishima
A Mishima hay que leerlo y releerlo, pocas escrituras más perfectas existen. Este es uno de sus grandes clásicos sobre la pasión, el orgullo, la pulsión de la muerte y sin duda su gran tema, ese tótem que el torturado japonés siempre buscó pero nunca consiguió vislumbrar: la trascendencia de hombre sobre su propio destino.
Los príncipes valientes, de Javier Pérez Andujar
Primera novela del autor de Sant Adrià del Besòs. Me ha pillado un poco a contrapié, esperaba el típico coming of age de extrarradio barcelonés pero por encima de todo es un ensayo sobre sus influencias literarias y artísticas. Llena de sabiduría y cultura popular, retrato de una época y sus símbolos. Interesante.
Tor, tretze cases i tres morts, de Carles Porta
Un clásico patrio del true crime. Su calidad literaria no pasará a la historia ni lo pretende, pero es un gran mosaico de ambientes y personajes fascinantes.
