Las dos últimas novelas que me he leído han sido El Idiota de Dostoievski y La Guerra Interminable de Joe Haldeman.
El primero me ha parecido un poco coñazo exceptuando el tramo final (al parecer, al contrario que a la mayoría). Por otra parte los personajes me parecen todos un poco caóticos e histriónicos, como que son tan complejos que al final no se definen del todo bien. Menos el protagonista, que le da nombre al libro y no por nada. Al principio es gracioso, pero es demasiado imbécil y cansa a la mitad. Mucha conversación insustancial, pero de esto último está repleta la literatura universal por el formato ese de fascículos (desconozco si es el caso pero no me extrañaría).
El de la Guerra Interminable bien, pero tampoco es una cosa increíble. Tiene el toque ese innecesariamente tecnicista y aséptico que caracteriza a las ciencia ficción clásica. Se nota que lo ha escrito alguien con formación científica, aunque más corto de habilidad narrativa. No tiene mucho que contar más allá de lo de los desfases temporales relativistas y eso le pesa, pero bueno. Podría haberle sacado más partido tanto a los cambios que se van produciendo en el mundo como a las escenas de acción, un poco descafeinadas. El final peca de lo mismo, un poco desaprovechado y anto climático.
A parte de eso estoy releyendo los diálogos completos de Platón que los ha reeditado hace poco Gredos con un encuadernamiento curioso. Y dos libros de historia de la filosofía, el primer volumen de Copleston y otro sobre el pensamiento filosófico y científico.
Los libros técnicos ni los voy a contar porque los uso más como manuales.
Rai93 Estuve a punto de comprarme Neuromancer, de William Gibson, pero leí por ahí que igual era bastante denso y escrito de un modo enrevesado que lo hacía
Te contesto un par de meses tarde. Lo primero, si lo vas a leer hazlo en inglés, porque la traducción en español es terrible. Traducen cosas como Come here baby a Ven aquí bebé. Segundo es un libro regulero en lo que a calidad literaria se refiere, incluso para ser de ciencia ficción. Su mérito está en que fue el papá de la estetética y el mundo cyberpunk que tan de moda puso el videojuego hace un par de años, pero los personajes, la trama, el desarrollo... no hay por donde cogerlos. O sí, pero todo está tan trillado que hay veces que dan ganas de acostarse. Aún así merece la pena si te gusta ese mundo, pero si no prescindible.