Yo a Iker y a d'Arbó les escuchaba en la radio en su momento, hace mucho. En la SER uno y en RAC-1 el otro. Me gustaba más Iker porque, más allá de su magufería over 9000, como comunicador es muy top. Sabe meterte en las historias y hacerte disfrutar de ellas, aunque, como yo, pienses que son un Invent del copón. Sebastián D'Arbó, al que imagino que los no catalanes no conoceréis, es mucho más risible de primeras.
Dicho esto, me parece bastante claro que el hate desmedido que tiene en redes es por dejar en ridículo al gobierno en su momento y, también, por tender a la derecha. Como le pasa a otra gente como Motos o Risto, por cierto. Personajazos todos, pero con un hate exagerado para lo que hacen, odio popular que gente todavía más nociva como Jorge Javier no recibe ni por asomo, por ser de izquierdas.
Al final Iker es un tipo que habla de fantasmas y aliens. Se piensa que es Mulder y lo hace con ese tono de creérselo mucho que lo hace más "veraz" y divertido, pero es puro entretenimiento. Le hacen un favor con el casito o cuando un científico serio intenta refutarle en redes, porque le validan frente a sus fans.