Milly y Ronan
Mientras se dirige al camino que sale de El Beso del Bosque, Olaf agita la cabeza ligeramente, sus pasos firmes resuenan en el suelo del bosque. "En caso de haber culpables, no sería uno solo, muchacho. Pero no, no creo que los O'Byrne sean culpables de nada", dice, deteniéndose un momento para mirar hacia atrás, asegurándose de que Milly y Ronan le siguen.
Con una mano en el bolsillo y la otra sujetando su bastón de caminante, continúa mientras reanuda la marcha. "Es cierto que se dice que Brigid trajo las viejas costumbres celtas al Nuevo Mundo, en una comunidad profundamente puritana que no las comprendía, y que instruyó a su nieta, quien crecería para ser la mujer más sabia de estas tierras", explica con un gesto de la mano, como si desplegara un mapa invisible de la historia. "Pero ha habido otros actores a lo largo del tiempo y todos han contribuido a que nos encontremos donde estamos."
Sus ojos se entrecierran ligeramente, su voz baja un tono al mencionar el destino de Siobhan. "Si en lugar de quemar a Siobhan hubieran intentado razonar con ella, quizás nada de esto habría sucedido. Pero todo eso es agua pasada, ahora toca pensar en el presente y el presente es vuestro amigo Leo."
Al llegar a una bifurcación en el camino, se detiene, apoyando ambas manos en el bastón. "Viendo de dónde venimos, solo puede estar en el parque botánico. Pero esa zona es un laberinto, perfecto para una emboscada. Me hubiera gustado evitar ir allí, pero imagino que no puede evitarse", concluye con resignación. "Vuestra es la última palabra."
Tened en cuenta que está anocheciendo, la cobertura viene y va y tampoco es que sea muy fiable el mandar mensajes cerca del Beso del Bosque.